DEJEMOS NUESTROS PROPIOS INTERESES Y VOLVAMOS A LA PASIÓN POR
LAS ALMAS
Hechos 19:27 Y no solamente hay peligro de que este
nuestro negocio venga a desacreditarse, sino también que el templo de la gran
diosa Diana sea estimado en nada, y comience a ser destruida la majestad de
aquella a quien venera toda Asia, y el mundo entero.
Demetrio dijo la pura verdad y usa de mucha franqueza.
Confiesa públicamente que su preocupación principal tenía que ver con su ganancia
y Apeló a dos de los sentimientos más fuertes del corazón humano: el interés
material y la religión.
Así como Demetrio dijo
la verdad, cuantos evangélicos, pastores, profetas apóstoles si digieren la
verdad del motivo que los mueve predicar el evangelio, que bueno sería predicar el evangelio como se predicaba
en aquellos tiempos, Pablo no cobraba par predicar, Pedro no cobraba para
predicar, Jesús no tenia donde recostar su cabeza, hoy los predicadores van a hoteles,
tenemos que garantizarle las ofrendas, tenemos que garantizarle la cantidad de
gente, y ponen miles de requisitos para predicar, solo el interés es material y religión, no les importa las
almas, no le importa la gente que va al infierno, y sus predica nunca están direccionadas
a la confrontación de las mentiras y los motivos que nos llevan al infierno,
entregan un mensaje de motivación y de gozo y de bendición, Queridos hermanos, es
hora de dejar las motivaciones religiosas y materiales, predique de la cruz,
predique del infierno, predique de que si no dejas las idolatría vas al
infierno, enseñe que si no dejas la mediocridad de vida espiritual se quedas y
su fin es el infierno, predique que si no se arrepiente de sus pecados va al
infierno. DEJEMOS NUESTROS PROPIOS INTERESES Y VOLVAMOS A LA PASIÓN DE
LAS ALMAS
La mayoría de las religiones y de los ministerios,
trabajan de esta manera, ellos saben cómo anda su pastor en cualquier ciudad
por los diezmo y las ofrendas, si baja las ofrenda y los diezmo, quiere decir
que el pastor no está trabajando, y es motivo de remoción de la ciudad donde
esté, así trabajan los grandes ministerio, solo religión y poder material.
No les importa las almas, solo el interés material, si
tienes una iglesia en un lugar de gente vulnerable y de bajos recursos, para
ellos no es de importancia, ellos quieren sus carteles en las calles
principales, estamos como estos religiosos que los ¡único que les importaba era
el poder material y el centro religioso!
El templo de la gran diosa Diana, diosa de la
fertilidad, el más famoso del mundo de aquel entonces, En cuanto a su tamaño y
riqueza no había en el mundo entero otro comparable. En fin, este templo servía
como el centro de la vida religiosa, social y económica del pueblo de Éfeso y
de "toda Asia".
HOY LA MAYORÍA DE LOS APÓSTOLES Y PASTORES
DESEAN LOS MEGAS TEMPLOS, PARA QUE, SI SERÁ DESTRUIDO Y QUEDA AQUÍ EN LA
TIERRA, DE QUE SIRVE LOS MEGA TEMPLO SI TU INTERÉS ES LA MATERIAL Y NO LAS
ALMAS
Este texto bien describe el poder del evangelio
predicado por el apóstol Pablo y la consecuencia inevitable del éxito de la
obra de evangelizar.
Al avanzar el evangelio a través del Imperio Romano
"el templo de la gran diosa Diana" y muchos otros templos llegaron a
ser estimados en nada. Desde luego, los que se convirtieron a Cristo
abandonaron tales templos y dejaron de comprar los hechos por
Demetrio y sus socios.
Cuando se Predicar el evangelio que es poder de Dios,
comienza a caer todas las artimañas del enemigos, y sale todo a luz, y las
vendas que tienen cautivas las vidas comienzas a caer en el nombre de Jesús, y toda
obra de hombre es estima como nada ante el poder de Jesucristo nuestro señor,
que el mundo sepa que no hay religiones, no hay hombre, que nos lleva a la
verdadera libertad, solo es por el evangelio poderoso de Jesucristo, tenemos la
palabra de Dios fiel es ella en todo, sea Dios veras y todo hombre y toda
religiones mentirosas.
Hechos 19:28 Cuando oyeron estas cosas, se llenaron de
ira, y gritaron, diciendo: ¡Grande es Diana de los efesios! -- Compárese 1 Reyes
18:26, "invocaron el nombre de Baal desde la mañana hasta el mediodía,
diciendo: ¡Baal, respóndenos!" Cuántas personas "razonan" de
esta manera, a pura fuerza de pulmón. Es una táctica de ignorancia y de
prejuicio.